El ronquido, científicamente llamado ruido respiratorio, se produce cuando pasa el aire a través de la laringe hacia y/o desde los pulmones.
Puede estar, o no, asociado a otros signos clínicos: intolerancia al ejercicio, pérdida de rendimiento, dificultad para recuperar o tos.
Varias patologías pueden producir ruidos respiratorios:
- Desplazamiento dorsal del paladar blando
- Hemiplejia laríngea
- Atrapamiento epiglótico
- Quiste subepiglótico
- Colapso del pliegue alar
De todas ellas, la hemiplejia laríngea es una de las más frecuentes. Corresponde a una axonopatia del nervio laríngeo recurrente y su degeneración induce la parálisis y atrofia de la musculatura laríngea, responsable de la abducción y aducción de los cartílagos aritenoides.
El diagnóstico definitivo se obtiene mediante endoscopia y su clasificación en 4 grados.
El tratamiento es quirúrgico y las principales opciones son el tie back o laringoplastia y la reinervación laríngea que se suelen acompañar de una ventrículo-cordectomía.