¿Qué es el síndrome de cushing
El síndrome de Cushing es una enfermedad endocrina que afecta a caballos, generalmente de edad avanzada (a partir de 16 años en adelante), y ponis. Conlleva una alteración metabólica provocada por la *disfunción de la glándula pituitaria*, concretamente de la parte intermedia, por eso la denominación abreviada últimamente más aceptada es la de PPID (Equine Pituitary Pars Intermedia Dysfunction).
Esta glándula es la encargada de la producción y liberación de hormonas con efectos muy amplios a nivel orgánico. La alteración de su parte intermedia supone un aumento en la producción de la hormona adrenocorticotrópica o *ACTH, que estimulará la producción y liberación de elevadas cantidades de cortisol.
¿Cómo puedo identificar el síndrome de cushing?
Los signos clínicos que pueden aparecer en el síndrome de Cushing incluyen:
– Hipertricosis (pelo anormalmente largo y rizado)
– Cambios en la condición corporal (pérdida de peso, atrofia muscular y desarrollo de abdomen péndulo)
– Disminución del rendimiento deportivo.
– Apatía o letargia
– Aparición de acúmulos de grasa, en áreas muy concretas: zona supraorbitaria, cresta del cuello, comienzo de la cola, zona mamaria.
– Laminitis.
– Poliuria y polidipsia (aumento de la ingestión de agua y de la micción). Solo en el 30% de los casos.
– Infecciones recurrentes
– Sudoración anormal.
– Infertilidad.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico se basa en la detección de los signos clínicos mencionados, si resultan obvios, y en la realización de distintas pruebas laboratoriales que pueden llevarse acabo según el caso:
– Medición de la ACTH basal sanguínea.
– Dos pruebas de estimulación:
*Test de estimulación con TRH (hormona liberadora de tirotropina) *Test de supresión con dexametasona: midiendo el cortisol sanguíneo antes y después de la administración de glucocorticoides.
– La detección de la existencia de resistencia a la insulina, la cual suele ser habitual en estos pacientes.