¿Sabías que existen diferentes factores que pueden hacer que tu caballo sea más predispuesto a padecer un tipo de cólico u otro? Hoy intentamos que reflexiones un poco sobre cinco de ellos.
Conocer un poco más esta patología tan usual te puede ayudar a comprender y sobrellevar una situación de este tipo y sobre todo a intentar evitarla.
FACTORES DE RIESGO
Existen multitud factores que pueden desencadenar un cólico, determinar cuál de ellos ha sido el causante nos facilitará que no se repitan este tipo de situaciones. En general, se puede asegurar que los caballos que han padecido un cólico son tres veces mas propensos a volver a sufrirlo que un caballo que nunca haya tenido este problema. Vayamos con los factores:
- Raza:
Ninguna raza se puede decir que sea inmune a los cólicos. Hay unos estudios que apuntan a la raza árabe como la más predispuesta, mientras que otros apuntan hacia los Pura Sangre Inglés. Un dato en el que sí coinciden la mayoría de estudios es en que los sementales centroeuropeos parecen más susceptibles a padecer hernias, debido al hecho de tener anillos inguinales de mayor tamaño.
- Edad:
Los caballos jóvenes y los más mayores parecen tener menor riesgo de cólicos simples, mientras que las edades medias presentan una casuística mayor.
Si nos paramos a estudiar qué tipo de cólicos han padecido este tipo de animales, vemos que entre los 6 y los 12 meses de vida existe una mayor incidencia de intususpecciones ileo cecales y que caballos mayores de 12 años tienen mayor predisposición a padecer lesiones estrangulantes o cólicos que precisen cirugía.
- Sexo:
El sexo aparentemente es una variable que también influye en el riesgo, siendo la hernia inguinal más frecuente en sementales y los desplazamientos y torsiones de colon más frecuentes en yeguas periparturientas.
Los machos, ya sea castrados o enteros, parecen tener mayor riesgo de padecer atrapamiento de intestino delgado en foramen epiplóico.
Y, por lo general, la mayoría de machos y hembras se ven afectados por igual por cólicos simples, dado que realmente el factor de riesgo más importante para este tipo de cólicos suele ser el manejo y/o actividad.
- Dieta:
La alimentación ha sido siempre el mayor factor de riesgo al que se atribuye la aparición de un cólico.
La sobrecarga de grano incrementa no solo el riesgo de cólicos sino también el de desarrollar laminitis. Por otro lado, alimentos como el trébol, algunos tipos de pasto e, incluso, la alfalfa han sido implicados en la aparición de timpanismo.
Al estudiar situaciones donde se aportan altas cantidades de grano o donde se realizan cambios en el tipo de heno y grano durante el año, todas ellas conllevan un incremento en la incidencia de cólicos si los comparamos con caballos a los que no se les somete a ninguna variación en función de la época del año o que no toman apenas grano.
El acceso o restricciones al consumo de agua es, por supuesto, otro factor de riesgo a tener en cuenta que nunca podemos olvidar de cara a la prevención de un cólico.
- Manejo:
El estabulamiento de los caballos en las hípicas o ganaderías, siempre se ha considerado como un factor de riesgo considerable.
Está demostrado que las impactaciones de ciego y colon mayor en caballos son más elevadas cuando se les somete a una bajada drástica de la actividad, ya sea por condiciones climatológicas o derivadas de otros tipos de problemas, como cojeras o reposo tras una cirugía.
La densidad de caballos que viven en padocks sueltos también puede llegar a influir en la incidencia, bajando el riesgo conforme baja la densidad de animales.
Apuntar, por último, que puede llegar a existir también una influencia en cuanto a localización geográfica. El Grass sickness se diagnostica en Reino Unido, Europa y Latinoamérica, las impactaciones ileales se encuentran predominantemente en el sudeste de Estados Unidos, mientras que los enterolitos son muy frecuentes en California y Florida. Por su parte, los cólicos por arena e impactaciones se ven de forma indistinta en todo el mundo, siendo más frecuentes en aquellas localizaciones donde los caballos se alimentan en pastos donde el suelo es arenoso o, incluso, tiene contenido de grava fina.
En resumen, hoy solo hemos hablado de forma breve sobre cinco de la larga lista de factores de riesgo que pueden influir en la aparición de un cólico. La cantidad de factores naturales y no naturales es tan larga que lo más importante que debemos tener siempre en cuenta es intentar ser serios y razonables a la hora de alimentar y cuidar de nuestros caballos, intentando tener lo más controlados posible los factores que dependen de nosotros.